Calibración de una autoclave
¿Cómo calibrar una autoclave?
Es crucial ajustar el autoclave regularmente para garantizar que esté operando a niveles óptimos en todo momento, ya que esto impacta los resultados del proceso de esterilización del laboratorio. Incluso una pequeña disparidad en la temperatura podría implicar que los instrumentos no se estén esterilizando adecuadamente. La calibración del autoclave es simple y requiere solo dos herramientas estándar: un temporizador y un termómetro para medir la temperatura máxima. De esta manera, se supervisan tres funciones distintas: el control del tiempo, el control de la temperatura y el manómetro.
CALIBRACIÓN DEL TIEMPO
Configurar el autoclave para un ciclo estándar y presionar el botón de inicio en la máquina y el botón de inicio en el cronómetro, ambos al mismo tiempo. Si el tiempo en el cronómetro y el tiempo en el autoclave difieren en más de 30 segundos, tenga en cuenta el diferencial de tiempo directamente en el autoclave para que los técnicos sean capaces de hacer los ajustes adecuados cada vez que ejecuten una carga.
CALIBRACIÓN DE LA TEMPERATURA
CALIBRACIÓN DE LA PRESIÓN
Esta prueba debe realizarse luego de haber corregido cualquier discrepancia en el tiempo o la temperatura, ya que cualquier desviación afectará también la presión. Cargue el autoclave y realice un ciclo completo. El manómetro debe mostrar una lectura de 15 PSI cuando la temperatura alcance los 121 ºC. Una vez más, establezca cualquier diferencia en el manómetro para que los especialistas puedan configurar parámetros precisos durante la esterilización de los instrumentos. Es recomendable calibrar el autoclave al menos una vez al mes y documentar los resultados en un registro, que debe mantenerse actualizado y archivarse durante al menos dos años.